LA MARIPOSA QUE NO PODIA VOLAR
Inspiracion en el Camino
jueves, 28 de abril de 2011
LA MARIPOSA QUE NO PODIA VOLAR
LA MARIPOSA QUE NO PODIA VOLAR
domingo, 10 de abril de 2011
CAPSULAS DE REFLEXIONES- VIDEOS
VIDEOS MUSICA PARA EL ALMA
CAPSULAS- VIDAS DE EXITO - VIDEOS
lunes, 4 de abril de 2011
EL DON DEL AGUILA
SER COMO EL AGUILA....
ES VIVIR
Sin apegos.
Sin doble intención.
Sin otra que la de disfrutar.
No te fijes en el goce o la desdicha.
Observa, como el águila, la totalidad del paisaje
y si has de aterrizar, que no sea para aferrarte al suelo,
sólo para recoger lo que te sea bueno para el vuelo.
Así sea el don del águila,
estar por sobre las cosas, las situaciones, que,
como dentro de un bosque, no podemos vislumbrar más allá de su espesor.
Estar por sobre y en dominio.
Sin doble intención.
Sin otra que la de disfrutar.
No te fijes en el goce o la desdicha.
Observa, como el águila, la totalidad del paisaje
y si has de aterrizar, que no sea para aferrarte al suelo,
sólo para recoger lo que te sea bueno para el vuelo.
Así sea el don del águila,
estar por sobre las cosas, las situaciones, que,
como dentro de un bosque, no podemos vislumbrar más allá de su espesor.
Estar por sobre y en dominio.
QUE ES EL AMOR CONCIENTE, Y SUS DISTINTOS NIVELES
QUE ES EL AMOR CONSCIENTE Y SUS DISTINTOS NIVELES
El Amor es el Sentimiento de Unidad y Conciencia que está dentro de tu Corazón.
Podemos vivir la vida desde distintos niveles de conciencia. Cuanto más profundo es el nivel de conciencia en el cual vivamos, más profunda y gratificante será nuestra vida.
Amar no es desear, atraer o sufrir, amar es expandir nuestra propia conciencia.
Amar Conscientemente es una de las experiencias más maravillosas que podamos imaginar, porque sin conciencia, el amor queda reducido a un acto animal que agota, mientras que vivido con conciencia, desde el corazón es fuente de felicidad y energía.
Amar es estar por encima de la separabilidad, de la dualidad, del temor y del miedo. San Agustín decía: “Ama y haz lo que quieras”. Ello quiere decir que cuando amas eres libre y puedes hacer lo que quieras. También puedes hacer lo que quieres (o lo que crees que quieres) sin amor; pero entonces estás reaccionando y el verdadero amor, el Amor Consciente, no es reacción, sino continua creación.
El amor es lo que nos proporciona la alegría de vivir, es la sal de la vida y ello por una razón muy sencilla, a saber, que la vida es expansión de la conciencia. Sin amor, la vida está bloqueada, no tiene sentido, o al menos no tiene sentido para el que no ama. Parecería como si sin amor viviéramos en tinieblas.
Cuando amamos estamos transmitiendo aquello que todo el mundo está consciente o inconscientemente, buscando; por ello mismo cuando amamos se nos abren las puertas de los milagros. Todos podemos vivir una vida amorosa más rica y plena si aprendemos a amar con más conciencia. No se trata de llegar a una meta determinada, sino de crecer, de crecer por dentro, irradiando aquello que está en el interior de todos los hombres, aquello que llamamos Amor.
El Amor es el sentimiento de Unidad y Conciencia que está dentro de tu Corazón. Cuando amamos a alguien estamos en contacto con el Amor universal que está dentro de cada uno de nosotros y lo irradiamos a nuestro alrededor. Si queremos llegar al Amor universal, comencemos amándonos a nosotros mismos y a quienes nos rodean desde el Corazón.
El Amor Consciente es un logro importante que puedes obtener mediante la práctica de los siete principios siguientes. Se trata de patrones de conducta que aumentarán tu nivel de conciencia y harán que todo lo que vivías, incluido el amor adquiera más conciencia.
1. Trabajar por tu Paz Interior
Todo, en esta vida depende de cuán grande sea el nivel de tu paz interior. Cuanto más en paz estés contigo mismo, más en paz estarás con cuanto te rodea y cuanto más armónicamente vivas contigo mismo, más en armonía estarás con los demás. La paz interior no es sólo un logro que te llenará mucho más que la satisfacción de cualquier deseo: es el estado original del hombre a partir del cual la vida se convierte en un milagro permanente.
2. Aprender a Perdonar
El secreto para ser feliz se halla en el perdón. Cuando perdonamos a aquellos que nos han causado daño, en realidad estamos sanando nuestra relación con nosotros mismos. El perdón lo resuelve casi todo; perdonar es la clave de la evolución. El perdón es la magia porque te libera del resentimiento y de los patrones erróneos que te hacían infeliz. Cuando perdonamos se producen toda una serie de cambios en nuestro organismo y en nuestro corazón que hacen que vivamos la vida con una plenitud creciente. Perdonar es abrir tu Corazón a los efluvios del Amor Universal.
3. Amarte a ti mismo
Cuando nos amamos a nosotros mismos, aparecen los milagros en nuestras vidas. Es absurdo querer emprender un camino de amor consciente si antes no te amas a ti mismo. Amarse a sí mismo es no juzgarse con dureza, perdonarse y concederse “caprichos” de vez en cuando. Amarse a sí mismo es algo más; es Aceptarse y Aprobarse tal cual somos porque sabemos que somos perfectos. La vida entonces se convierte en una discreta pero maravillosa sucesión de pequeños milagros.
A medida que practicas el amor consciente hacia ti mismo, te das cuenta que tu salud mejora, que tus amigos te hacen más caso, tus relaciones son más satisfactorias y toda tu vida se torna más creativa. Amándote a ti mismo despiertas en ti el Amor que atraerá hacia ti el amor de los demás. Es la mejor manera de hacer que los demás te amen, sin coacción, sin violencia, con dulzura.
4. Obedecer a la Voz Interior
Dentro de ti, en tu Corazón, hay una inteligencia conectada con la inteligencia cósmica, y esta inteligencia te habla a través de una voz: la voz interior que te aclarará cualquier duda que se te plantee y te ayudará a caminar con el corazón. Con el tiempo descubrirás que la voz interior es un verdadero maestro interior. Acepta sus lecciones y ponlas en práctica. El te guiará en los momentos difíciles
5. Vivir el momento presente, aceptando lo que viene y no intentando retener lo que se va
Cuando nuestra mente se encuentra ocupada en pensar qué pudo haber ocurrido o que ocurrirá, cuando está enfocada en el pasado o en el futuro, no está viviendo el presente. Cuando no vivimos el presente estamos desperdiciando cantidades ingentes de energía lo que produce: Ansiedad, Depresión, Tristeza, Desamor.
En el Amor Consciente, vivimos el “aquí y ahora” todo lo que necesitamos para ser felices. No debemos obsesionarnos y la mejor manera de lograrlo es haciéndonos conscientes del amor que llevamos dentro.
6. Dar antes de recibir
Es sumamente importante recordar que la verdadera esencia de nuestro ser es el Amor y que sólo viviremos rodeados de Amor cuando conectemos con él. Cuando vivimos con conciencia, nos damos cuenta de que tenemos todo lo que necesitamos y en el momento en que lo necesitamos.
Si creemos que se nos está negando algo que merecemos, es que algo falla todavía en nosotros. Es entonces cuando debemos practicar el dar. No hemos de dar esperando nada a cambio; no sería “Dar”, sino “cambiar”. En la práctica del dar consciente damos porque sabemos que dando nos estamos conectando con el Amor Universal y cuando estamos conectados con éste, automática y espontáneamente recibimos lo que merecemos en cada momento.
7. Actuar con Sinceridad
El camino hacia la conciencia pasa por la total sinceridad. Haz de ser completamente honesto y sincero contigo mismo, pues en cuanto abres tu corazón para que se expanda, éste aceptará todo lo que le propongas sin discriminar qué es verdad y qué es mentira. Si mientes, te estarás mintiendo a ti mismo.
Cuando tengas que elegir entre lo correcto o lo que te agrada (a veces pueden coincidir), si eliges lo correcto, habrás avanzado un paso más en el camino del amor consciente.
1. NO TE ENAMORES DE LAS ESPECTATIVAS
2. NO TE ENAMORES DE LA ILUSION (también tu lo serías)
3. NO TE ENAMORES DEL PARA SIEMPRE (todo principio tiene un final)
4. NO TE ENAMORES DE QUIEN TE HAGA FELIZ (serías una dependiente)
5. NO TE ENAMORES DE QUIEN TE COMPRA (el amor no está a la venta)
6. NO TE ENAMORES DE UN SUSTITUTO (el amor es irreemplazable)
7. NO TE ENAMORES DE QUIEN TE HAGA BIEN EL AMOR (crearías una adición)
8. NO TE ENAMORES DE UN SUEÑO (siempre terminarás despertándote)
9. NO TE ENAMORES DE QUIEN TE DA TODO (no serías nadie)
10. NO TE ENAMORES DE QUIEN ES PERFECTO (hasta te aburrirías)
11. NO TE ENAMORES DE QUIEN CREES POSEER ( tu eres la poseída)
12. NO TE ENAMORES TRATANDO DE HUIR DE ALGUIEN (tu sombra te seguirá a todos lados).
Mas bien….
1. ENAMORATE DE LO QUE ES (solo ama lo que se te presente)
2. ENAMORATE DE LA REALIDAD (te da la oportunidad de recrearlo siempre)
3. ENAMORATE DEL AHORA (ahhh!! la magia del momento)
4. ENAMORATE DE LA FELICIDAD (hay más motivos para ser feliz que para pensar quien nos las dará)
5. ENAMORATE DE QUIEN TE DA (que no te pide nada a cambio)
6. ENAMORATE DE CON QUIEN ESTAS (sin temor)
8. ENAMORATE DE QUIEN TE ACEPTA (que ni siquiera te cuestionaría)
9. ENAMORATE DEL QUE RESPETA TU INDIVIDUALIDAD (tienes derecho a tu propio espacio)
10. ENAMORATE DE QUIEN RESPETA TU LIBERTAD ( el amor es así… de libre)
11. ENAMORATE….PORQUE ESTAS ENAMORADA DE TI MISMA
12. ENAMORATE SIN EXIGIR (el amor no es una obligación…o un tener que………..)
Y recuerda……….
Ama como el sol que te ama..y no te pide nada porque te mantiene caliente…
Ama la lluvia que te ama tanto que te refresca….y no te pide nada…
Ama esa agua que tomas…con la que te bañas….que si tratas de poseerla se te irá de tus manos.
Ama a aquel árbol que sombra y oxigeno te da…..ni siquiera puedes poseer el aire que respiras…
Ama con libertad solo ama….PORQUE ERES UN SER LIBRE .
sábado, 2 de abril de 2011
PERSISTES AUN EN MOMENTOS DIFICILES?
Persistes, aun en momentos dificiles?
Por Laura Foletto
Estoy observando una tendencia desde hace un tiempo, tanto en mí como en los que estamos con la conciencia despierta: estamos hartos y cansados.
No valen eufemismos ni sutilezas. Como me dijo un paciente: “¡No doy más! ¿Cuándo va a ser mi tiempo, cuándo van a abrirse las posibilidades?!”. Muchos sentimos así. Estamos trabajando en nosotros mismos (y algunos también con otros) desde hace años, hemos tomado decisiones fundamentales, hemos pasado por toda clase de pruebas, pero… pareciera que todavía hay más de eso y nada bueno por delante.
Me han sucedido varias de estas crisis en estos años. “¿Hasta cuándo?” es la pregunta más frecuente. Luego de cada una de ellas, he elegido continuar no sólo porque no puedo hacer otra cosa (mi corazón está en ello más allá de cualquier lógica o problema) sino porque me he dado cuenta de todo lo que he aprendido y cambiado en ese tiempo, en una nueva espiral de evolución.
A pesar de que mi pasado es casi inexistente ahora (superado, perdonado, olvidado, en paz), sí recuerdo el vacío y la frustración, el miedo y la desvalorización en que vivía. Cada persona y situación en el camino me han vuelto más fuerte, confiada, serena y plena. No puedo más que agradecer.
Nos enganchamos de objetivos y cifras externos para medir cuánto hemos avanzado, sin darnos cuenta de que eso lo hace el Ego. La meta de nuestra alma es el aprendizaje. No le importa si debemos perder un empleo, amigos, comodidades o lo que sea para lograrlo.
Ahora, ¿es necesario que sea tan dramático? Obviamente que no, pero nuestras resistencias lo hacen forzoso. Y esto es así tanto para los que no están en el camino sagrado como para los que lo estamos. Observo una enorme ilusión y escapismo pueril en muchos. Como si, porque leen, meditan, hacen trabajos energéticos o se juntan en grupos “es piri tuales” (lo pongo entre comillas porque todo es es piri tual), las cosas del mundo se les darán mágicamente (o los extraterrestres los vendrán a rescatar).
No existe tal cosa. No podemos escapar de la labor interna, de la integración sombra/luz, femenino/masculino, interior/exterior, de la dualidad. Y esto se dará en lo cotidiano: en las relaciones personales y sociales, en el trabajo, en la economía, en el ocio, en todo.
Otra cosa que observo es cómo el pasado no resuelto está apareciendo para ser sanado e integrado. Puede tomar la forma de personas, de circunstancias, de emociones, de enfermedades, de cosas que se rompen y necesitan ser reparadas, etc. Estamos limpiando y cerrando. No podemos entrar a lo Nuevo colgados de lo viejo. Tenemos que estar vacíos y plenos. Vacíos de conflictos y plenos de nosotros mismos.
En este complejo panorama, la perseverancia es fundamental. Cuando nos sentimos agotados, drenados, desalentados; cuando las situaciones se presentan complicadas y desafiantes; cuando parece que los demás (sobre todo, los que están atados a la vieja energía) obtienen las mieles del éxito y nosotros estamos perdidos, como habiendo saltado al precipicio y pataleando en el aire; cuando reclamamos en la oscuridad… la potencia del alma, que persiste en la eternidad del Universo, susurra que continuemos, muestra la luz al final del túnel, proporciona el calor que necesitamos.
Jamás nos abandona y nosotros tampoco debemos abandonarnos. Antes de sentarme a escribir estas palabras, estaba mirando la lluvia por un ventanal. Recordé que, por años, tuve una enorme gotera que caía directamente sobre mi cama. El consorcio se resistía a arreglarla porque era muy complicado y costoso. Después de insistir largamente, lo hicieron. Comencé a agradecer que ahora estuviera arreglado y se me llenaron los ojos de lágrimas. Me surgieron tantas situaciones en las que siempre se solucionó todo, cuánto he sido protegida y ayudada por tantas personas (los medios amorosos que Dios/Diosa utilizó para hacerlo), cuánto mejor estoy ahora, cuántos hermosos proyectos albergo en mi corazón, qué maravilloso es estar en este tiempo y lugar excepcionales.
Vuelvo a llorar sobre el teclado: somos cuidados y amados más allá de cualquier oscuridad y dificultad. Reemplacemos el NO por el SÍ. Laboremos cariñosamente adentro y afuera. Sin esfuerzo, pero con confianza. Unidos. Pronto, tendremos un empujoncito liberador. Persistamos.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)